Comparto este es cuento corto, que será útil para leerle a los niños.   Lo escribí especialmente para los amantes de los burros (animal en vías de extinción).   Hace muchos años en un poblado costero las 10 familias que lo habitaban, tenían un solo burro para sus necesidades que eran múltiples, éste era el famoso burro Asnurro. Asnurro se destacaba por su calma y su bondad, se podía decir que daba cierta tranquilidad a los habitantes, sobretodo por los servicios que prestaba. Siempre estaba alrededor de la plaza, como esperando alguna encomienda.

Ven aquí Asnurro unos sacos debes cargar tu eres Asnurro, el mejor de todos los burros.

Cuando la cosecha de sandía y melones había llegado a feliz término, preparaban a Asnurro para que saque la fruta al poblado más cercano, ataban a la montura una carreta  ahí todos ponían la producción para ir a venderla. Si se enfermaba el vecino, Asnurro estaba listo para llevar, en su lomo, al afectado y por supuesto a su lado iba una serie de acompañantes cuidando al enfermo y a Asnurro. El papel que más le gustaba hacer al burro, era cuando tenía que transportar encabezando la caravana, a la reina del lugar. Y así se oía el cantar:

Viva Asnurro, viva, viva Viva asnurro el mejor de todos los burros.

lo único que le molestaba a Asnurro era que alguien se le pare atrás sin el saberlo. Y entre rebuzno y rebuzno se le oía este cantar:

 Soy el burro Asnurro bueno y servicial, lo único que hace con daño a los demás es que extiende las dos patas si alguien se para atrás.